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Liderazgo

Actualizado: 10 ago 2022


Ilustración por Carlos Guevara


¡Eres un Líder!

...y te diré porqué


Encuesta: ¿Qué hace a un buen líder?





Después de ver el video y de haber respondido a estas preguntas, estoy segura de que aun cuando el concepto del liderazgo puede o bien, ser muy abstracto, o, al contrario, ser extremadamente práctico, lo que sí no podemos cuestionar es que cada persona ve en él algo distinto y que esta percepción nace a partir de nuestras experiencias. Es claro, que varios autores y personajes célebres (como los que puedes ver a continuación), han construido el concepto del liderazgo, pero ¿es realmente, así como vivimos el liderazgo en nuestro día a día?(Estas imágenes van en slideshow).





Estas definiciones son del conocimiento de las personas que se encuentran en un entorno que demanda crecimiento y que requiere que, una y otra vez, se reinventen como líderes (o de las personas que están interesadas en el tema). Vemos mucho de lo primero en entornos laborales, organizacionales, y en general, en equipos que se cuestionan: “¿Cómo podemos mejorar nuestro rendimiento?”. Tal vez, como estudiantes, esta no es nuestra realidad (por el momento); sin embargo, el liderazgo no es solamente relevante para equipos de trabajo, porque se basa en un importante principio que establece que un líder no puede ser denominado como tal sin antes trabajar en sí mismo.


Este pensamiento me recuerda a algo que me comentaron hace tiempo. Mientras conversábamos acerca de quién es un líder y quién no lo es (una pregunta que de verdad no puede reducirse a un simple blanco y negro), una persona muy importante para mí dijo: “Sabes que eres un líder cuando elogian lo que haces”. Esto se quedó conmigo y es realmente interesante porque, en pocas palabras, quiere decir que eres líder cuando otra persona percibe que estás haciendo algo notable y que te diferencia de los demás. No necesariamente significa que eres mejor, pero sí que, en aquel rasgo específico, tú te destacas.


Para hacerlo todavía más exacto, propongo lo siguiente: “Sabes que eres un líder cuando elogian lo que eres”. Antes de continuar con los detalles, es importante decir que, al empezar a escribir este blog, yo no me consideraba una líder, creo que con frecuencia escuchamos este término y huimos de él, por distintas razones. Ahora reconozco que puedes ser un líder en distintos ámbitos y que la esencia de ser un líder es el crecimiento personal y profesional continuo. Para ser un “líder” hay que nutrir quienes somos. Esta es la base del autoliderazgo, el cual parte de la pregunta: “¿Cómo puedo mejorar y con qué propósito lo hago?”



El Autoliderazgo: ¿Por dónde empezar?


Partiendo del principio que comentamos antes (“para ser un líder debes antes trabajar en ti mismo”) y de la idea de que eres líder cuando elogian lo que eres, definamos al autoliderazgo como la decisión consciente de hacerse responsable por uno mismo y de sus decisiones (antes de proponerse liderar a otros). Dee Ward Hock, el fundador de la tarjeta VISA, dijo lo siguiente: “Si quieres liderar, invierte por lo menos un 40% de tu tiempo en liderarte a ti mismo”, no podría estar más de acuerdo. Incluso me atrevo a decir que, en un inicio, ese porcentaje debería estar en un 75% o más. Cuando no comprendemos este concepto tan básico, que involucra la autoconciencia, la autorreflexión y la autorregulación, es cuando nos topamos con personas que lejos de ser líderes, admiramos, respetamos o tememos por su “gran” carisma, su habilidad para influenciar a otras personas, por su posición dentro de un grupo o equipo, u otras características que son producto de la naturalidad o del status quo. Ser un líder no es algo que “sale natural” o que es innato, esto es clave. Ser un líder es una decisión.


Entonces, ¿por qué eres tú un líder? Eres un líder porque buscas mejorar para alcanzar tus objetivos, porque piensas con frecuencia en cómo hacerlo y porque identificas que, por medio de esta mejora continua, podrás impactar a los distintos entornos en los que te desenvuelves (tu casa, tu trabajo, tu grupo de amigos, algún club, la clase) y a las personas que se encuentran en ellos.



Empecemos: Fortalezas, Valores y Enfoque


Con eso fuera del camino, entremos a lo práctico. Empecemos definiendo tus fortalezas, tus valores y tu enfoque. ¿Son importantes? Sí, absolutamente. Sin estas tres cosas medianamente claras para ti, serás como un perro que corre por su pelota, pero no la regresa nunca; como un barco que sale a navegar sin su mapa; como un carro sin gasolina. No son los mejores ejemplos, pero se entiende la idea. Estos tres te permitirán orientar tus acciones, tus palabras y tus decisiones, y mantener un desarrollo constante. Ojo que no digo un desarrollo sin distracciones o sin altibajos, sino, un desarrollo constante.


Personalmente, identificar mis fortalezas, mis valores y mi enfoque fue lo que me ayudo a crecer en un momento de mi vida en el que no me sentía conectada conmigo misma, ni con mi entorno. Si sabes de lo que hablo, entenderás que las acciones del día a día se pueden poner muy difíciles muy rápido. Así que te invito a realizar las siguientes actividades que son la base para movilizar tu crecimiento, y si es tu objetivo, para nutrir el tipo de líder que eres.






¿Cómo mantener un desarrollo continuo?


Si has llegado a este punto, te preocupa la constancia o cómo realmente puedes llevar todo lo que has descubierto a un plan de acción de mejora continua. Creo que esta es una pregunta relevante en todo momento, no solo ahorita que eres estudiante, pasante y/o un apoyo dentro de tu hogar. Imagina lo que puedes lograr si empiezas a pensar en esto desde hoy, teniendo en cuenta que más del 80% de los líderes no tienen una idea clara de su enfoque o declaración de propósito. Fun fact (y uno muy alentador): La investigación sugiere que el conocer qué es lo que te motiva, incrementa tu probabilidad de alcanzar tus objetivos, por más grandes que sean. Así que sueña alto, pero con sentido.

Mira este video que te hablará de tres claves para seguir creciendo y desarrollando tus cualidades como líder: la autoconciencia, la autorreflexión y la autorregulación (si no quieres ver el video completo, descuida, empieza desde el minuto 5:30). Recuerda que poner en marcha tus fortalezas automáticamente moviliza tu liderazgo.




En fin...


Espero que todas las actividades, la teoría y tus reflexiones personales hayan sido de ayuda para potenciar el tipo de líder que ya eres. Este blog fue escrito para estudiantes que son líderes formales dentro de grupo o que tienen algo de autoridad dentro de una organización, y también para aquellos, que, como yo, no creían ser líderes, pero que poco a poco se están dando cuenta que no solo existe una manera de liderar, y que uno es líder a través de sus fortalezas y de sus ganas de mejorar y de servir dentro de su entorno.


Ser líder no es un título y no es una distinción que te hace mejor o peor que otras personas. Ser líder es tomar responsabilidad sobre uno mismo primero, para después facilitar un espacio en el que otras personas puedan hacerlo también. Muchas veces lo que nos obstaculiza al momento de tomar nuestras propias decisiones, al momento de vivir nuestras propias experiencias y al intentar combatir nuestros propios demonios, es el miedo a hacernos responsables sobre ellos. Es más seguro tener a alguien o a algo a qué culpar, pero la clave del liderazgo está más allá de aquello que te causa temor o de lo que todavía no sabes manejar. Mientras el crecimiento esté en tu mente y reconozcas tus fortalezas, tus valores y tu enfoque, poco a poco te acercarás (y seguro superarás) a esas personas en tu vida que admiras por su liderazgo.



Referencias

Aiken, L. R. (2003). Tests psicológicos y evaluación. Pearson education.


Craig, N., & Snook, S. (2014). From purpose to impact. Harvard business review, 92(5), 104-111.


Johnson, C. (2018). Check yourself – Accountability [Video]. YouTube. https://www.youtube.com/watch?v=bCteZqlwf-k


Kaiser, R. (2020). The best leaders are versatile. Harvard Business Review. https://hbr.org/2020/03/the-best-leaders-are-versatile-ones


Randall, K., Isaacson, M., & Ciro, C. (2017). Validity and reliability of the Myers-Briggs Personality Type Indicator: A systematic review and meta-analysis. Journal of Best Practices in Health Professions Diversity, 10(1), 1-27.


Saudman, L. (10 de junio de 2016). Great leaders start with self-leadership [Video]. YouTube. https://www.youtube.com/watch?v=vlpKyLklDDY


Sinek, S. (19 de mayo de 2014). Why good leaders make you feel safe [Video]. TED Conferences. https://www.ted.com/talks/simon_sinek_why_good_leaders_make_you_feel_safe/up-next#t-4881


Torres, R. (19 de febrero de 2014). What it takes to be a great leader [Video]. YouTube. https://www.youtube.com/watch?v=aUYSDEYdmzw&t=5s


 
 
 

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